La biografía de Alfred Lothar Wegener es digna de una novela de aventuras. Cualquier día hasta a alguien se le ocurrirá hacer una peli sobre él. No es para menos.
Astrónomo a los 24 años. Poco después meteorólogo. Para estudiar la atmósfera, ¿qué mejor que montar en globo? Pues nada, en compañía de su hermano Kurt, bate el récord del mundo de permanencia en vuelo: 52 horas y media colgados del aire en una barquilla de mimbre.
Astrónomo a los 24 años. Poco después meteorólogo. Para estudiar la atmósfera, ¿qué mejor que montar en globo? Pues nada, en compañía de su hermano Kurt, bate el récord del mundo de permanencia en vuelo: 52 horas y media colgados del aire en una barquilla de mimbre.
En 1906, con 26 años, su primera expedición a Groenlandia, en la cual permanece dos años:
investigaciones meteorológicas de alta atmósfera en el noreste y trabajos de cartografía .
De vuelta a Alemania (1908), inicia su labor como profesor de Astronomía y de Meteorología en la Universidad de Marburg.
En 1910 la observación de la coincidencia de los contornos a ambos lados del Atlántico le empieza a sugerir a idea de la “deriva de los continentes”. Al año siguiente cae en sus manos un artículo paleontológico en el cual se hacía referencia a la similitud de fósiles encontrados en Brasil y Africa, lo que probaba la existencia de un puente intercontinental remoto: A Wegener la idea de los puentes intercontinentales le parecía poco menos que absurda, pero el hecho de encontrar los mismos fósiles en continentes separados por un océano parecía concordar con su primitiva hipótesis de movimientos continentinentales.Wegener interpretaba esta conexión debida a que ambas regiones habían formado parte en el pasado de un mismo y único continente, el PANGEA ("toda la tierra". ).
1914, estalla la I Guerra Mundial. Wegener es movilizado. Capitán del ejército del káiser Guillermo. Es herido. Da que pensar que una de las mentes más brillantes del siglo pudo haberse quedado en los campos de batalla. Seguramente, más de uno así lo hizo y no nos enteraremos nunca. Otra razón para acabar con todas las guerras. La contineda finaliza en 1918. Alemania y los Imperios Austrohúngaro y Turco son derrotados.
En 1915 publica "Die Entstehung der kontinente und ozeane" (El origen de los continentes y de los océanos), obra donde desarrolla la teoría y argumentos de la “Deriva Continetal”. El libro se reeditará sucesivamente en 1920, 1922 y 1929.
En 1924 publica "Die Klimate der Geologischen Vorzeit" ("El clima en el transcurso del tiempo geológico") en colaboración con su suegro, Wladimir P. Köppen (creador de una clasificación climática que aún hoy es utilizada). A la muerte de éste ocupa la dirección del Departamento de Investigaciones Meteorológicas del Observatorio de la Marina en Hamburgo.
En 1926, acepta una cátedra de Meteorología y Geofísica en la Universidad de Graz (Austria). Por aquel entonces, lo cierto es que su credibilidad en los ámbitos científicos de la época era más bien mínima. Su Deriva Continental era acogida, en el mejor de los casos , con escepticismo, cuando no era directamente ridiculizada o,sencillamente, ignorada. Wegener nunca desistió de su idea, aun cuando reconocía que el mecanismo que era capaz de mover a los continentes no estaba plenamente explicado.
En 1910 la observación de la coincidencia de los contornos a ambos lados del Atlántico le empieza a sugerir a idea de la “deriva de los continentes”. Al año siguiente cae en sus manos un artículo paleontológico en el cual se hacía referencia a la similitud de fósiles encontrados en Brasil y Africa, lo que probaba la existencia de un puente intercontinental remoto: A Wegener la idea de los puentes intercontinentales le parecía poco menos que absurda, pero el hecho de encontrar los mismos fósiles en continentes separados por un océano parecía concordar con su primitiva hipótesis de movimientos continentinentales.Wegener interpretaba esta conexión debida a que ambas regiones habían formado parte en el pasado de un mismo y único continente, el PANGEA ("toda la tierra". ).
Esta hipótesis la expuso por primera vez en enero de 1912 en una conferencia celebrada en Frankfurt.
De todas formas, parece que el hombre se debía aburrir dando clase en la Universidad, así que, en 1912 se acerca de nuevo a Groenlandia.
Bate otro récord: la travesía a pie más larga del casquete glacial. 1200 km sobre la banquisa y el inlandsis.
1914, estalla la I Guerra Mundial. Wegener es movilizado. Capitán del ejército del káiser Guillermo. Es herido. Da que pensar que una de las mentes más brillantes del siglo pudo haberse quedado en los campos de batalla. Seguramente, más de uno así lo hizo y no nos enteraremos nunca. Otra razón para acabar con todas las guerras. La contineda finaliza en 1918. Alemania y los Imperios Austrohúngaro y Turco son derrotados.
En 1915 publica "Die Entstehung der kontinente und ozeane" (El origen de los continentes y de los océanos), obra donde desarrolla la teoría y argumentos de la “Deriva Continetal”. El libro se reeditará sucesivamente en 1920, 1922 y 1929.
En 1924 publica "Die Klimate der Geologischen Vorzeit" ("El clima en el transcurso del tiempo geológico") en colaboración con su suegro, Wladimir P. Köppen (creador de una clasificación climática que aún hoy es utilizada). A la muerte de éste ocupa la dirección del Departamento de Investigaciones Meteorológicas del Observatorio de la Marina en Hamburgo.
En 1926, acepta una cátedra de Meteorología y Geofísica en la Universidad de Graz (Austria). Por aquel entonces, lo cierto es que su credibilidad en los ámbitos científicos de la época era más bien mínima. Su Deriva Continental era acogida, en el mejor de los casos , con escepticismo, cuando no era directamente ridiculizada o,sencillamente, ignorada. Wegener nunca desistió de su idea, aun cuando reconocía que el mecanismo que era capaz de mover a los continentes no estaba plenamente explicado.
En 1930 regresa a Groenlandia. Allí fallece durante una expedición, probablemente a consecuencia de un paro cardiaco. Sus restos se encontraron cinco meses después de su partida de la base Eismitta; de ella había salido el día 1 de noviembre, su cumpleaños (50 años), acompañado de un tal Villumsen, cuyo cadáver, en cambio, no pudo
encontrarse.
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